Poema del libro Surcos de Luz

Sin límites en mi

Yo sé que el cuerpo que tengo 
tiene su espacio y su tiempo 
pero hay cosas que llevo
que son propio de lo eterno 

no sé ni cuando empezaron
y su fin está en lo incierto
y cuando hablo de estas cosas
me refiero al pensamiento 

Con él abarco infinito
con él vivo, con él siento
y aunque parezca mentira 
es mi motor, es mi centro. 

El me ordena caminar
hacer cosas al momento
y hasta puedo reaccionar
y oponerme a lo que pienso

Pero viene la razón
que es una en sus instrumentos 
y me obliga a obedecer 
pues sabe hacerlo en su método. 

Y este pensar, que no es mío 
sino que muchos tenemos 
es quien guía nuestra vida 
con la razón, que es su freno. 

Es responsable del mundo 
que actualmente conocemos 
y que construyeron otros 
que pensamientos tuvieron. 

No sabemos si los creamos 
o es del aire que vinieron 
pero fueron pensamientos 
los que en el verso surgieron.